El director del Instituto de Ciencias de la Vid y del Vino (ICVV), José Miguel Martínez Zapater, considera que la variación genética en la vid es «fundamental», ya que sin ella su cultivo no podría mejorar ni hacer frente a los problemas del cambio climático o las nuevas demandas de consumo.

Durante el curso de verano de la Universidad de Málaga dedicado a «Los recursos genéticos en la agricultura del siglo XXI» celebrado en Vélez-Málaga en el que ha participado Martínez Zapater ha afirmado que sin variación genética no se pueden desarrollar nuevas variedades y nuevas aplicaciones para la vid.

Tecnovino variacion genetica en la vid Martinez Zapater
El centro que dirige José Miguel Martínez Zapater busca formas de adaptación del cultivo de la vid y su producción a las nuevas condiciones climáticas, así como a las demandas de los consumidores. Esta foto de Martínez Zapater pertenece a una entrevista en vídeo de la Universitat Rovira i Virgili.

Desde el centro que dirige, con sede en Logroño, el Instituto de Ciencias de la Vid y del Vino (ICVV), se trabaja en proyectos nacionales e internacionales, según ha explicado para buscar formas de adaptación del cultivo de la vid y su producción a las nuevas condiciones climáticas, así como a las demandas de los consumidores.
En lo que se refiere a los problemas derivados del cambio climático, el también investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha comentado que plagas que anteriormente no atacaban a la vid o que no lo hacían con tanta virulencia, ahora sí lo están haciendo. «Hay un caso claro en el aumento de las acariosis, el ataque de especies de ácaros que antes no llegaban, y lo que hemos hecho es secuenciar el genoma de esta plaga y a partir de ahí se van a desarrollar nuevas aplicaciones», ha manifestado.
Otro aspecto que ha destacado es el de las demandas de los consumidores y ha afirmado que éstos reclaman mayor diversidad de vinos, especialmente en los blancos, y que se reduzca el uso de plaguicidas.

La tempranillo, la microbiología del vino y los efecto saludables del vino

Desde el ICVV se ha avanzado en la caracterización del genoma del tempranillo, «una variedad de referencia no sólo en La Rioja, sino en todo el país», y en la búsqueda de la variación que existe dentro de ella «y que permitirá adaptarla a nuevas situaciones y también desarrollar nuevos productos».
También ha explicado que existe un especial interés por el estudio de la microbiología del vino, el motivo es que cada vez presentan un mayor contenido alcohólico como consecuencia de un mayor contenido de azúcar en la uva, y para corregirlo se están investigando nuevas cepas de levaduras que produzcan menos alcohol.
Por otro lado ha hecho hincapié en los efectos saludables del vino, «consumido siempre con moderación», por sus contenidos antioxidantes o su papel como ansiolítico, aunque ha reconocido que la investigación en este sentido es «una asignatura pendiente».