El próximo mes de noviembre saldrá a la venta el nuevo Pago de Carraovejas 2015. Con la presentación de este vino, la bodega se une firmemente a una corriente imparable en España que defiende el origen y carácter de los vinos, por encima de los procesos estandarizados de elaboración.

El próximo mes de noviembre se pondrán a la venta las botellas de este nuevo vino que, sólo durante este año, convivirá con Pago de Carraovejas Reserva, que sale al mercado por última vez en su añada 2014. El público percibirá un cambio en el interior y el exterior; ya que Pago de Carraovejas 2015 presenta además un cuidado cambio de imagen, realizado por el estudio barcelonés Xavier Bas Disseny, elegido por la bodega por su particular sensibilidad hacia el sector del vino.
El año 2017 ha sido testigo de profundos avances en la Bodega Pago de Carraovejas; entre ellos, la ampliación y consolidación de su equipo, la inauguración del Restaurante Ambivium, el recibimiento de varios galardones y la redefinición de sus vinos, marcando claramente la línea a seguir en los próximos años.
Al frente de la bodega, desde hace 10 años, se encuentra Pedro Ruíz que junto al equipo directivo trabaja en sus siguientes retos: el apuntalamiento de sus vinos entre los iconos españoles, la internacionalización y el trabajo incansable en los viñedos con mayor potencial de la Ribera del Duero.

Concentración y expresividad

Como explica el propio Pedro Ruíz, “Llevamos años trabajando de manera muy intensa en la zona y sentimos que nuestro viñedo ha alcanzado un punto de madurez extraordinario. La añada 2015, cata tras cata, mostraba un claro aumento de concentración y expresividad, así como la frescura y elegancia que veníamos buscando. Era el momento”.