Partiendo de la tradición familiar, de un vino dulce hecho a partir de la verdejo tras su secado, Javier Sanz Viticultor ha desarrollado su VDulce de Invierno, que además de verdejo lleva una variedad traída desde Rumanía, Gorda de Moldavia, que recuerda en aroma a la moscatel. Tras una compleja elaboración que consta de tres procesos, se consigue un vino con una elevada concentración de azúcar y gran intensidad aromática.

Tecnovino VDulce de Invierno Javier Sanz ViticultorVDulce de Invierno pertenece a la Colección V de Javier Sanz Viticultor, un vino cuya elaboración, meticulosa, larga y compleja, aúna tradiciones familiares e innovación. Tradicionalmente se elaboraba con la verdejo un vino dulce a través de su secado en el desván familiar, un recinto sombrío en el que la baya pierde agua y concentra azúcar. Pero Javier Sanz buscaba un vino más complejo que ese dulce de la zona. Así que buscó una variedad que aportase al vino aromas y toques más complejos y especiales. Esta búsqueda concluyó en un viaje a Rumanía, en el que Javier recogió la variedad Gorda de Moldavia, que aporta unos interesantes aromas que recuerdan a la moscatel. Además, se adapta a la perfección al clima y al terreno de La Seca donde se ubica la bodega.
Este vino dulce se elabora a partir de un 80% de verdejo y un 20% de la variedad rumana Gorda de Moldavia y es el resultado de una compleja elaboración en Javier Sanz Viticultor basada en tres procesos que permiten una elevada concentración de azúcar y una gran intensidad aromática:

  1. Secado natural de la uva. Por un lado, se vendimia la verdejo en septiembre y se extienden los racimos en el sobrao o desván, un recinto sombrío en el que con el paso del tiempo se consigue que la baya pierda agua y que la concentración de azúcar sea lo mayor posible.
  2. Uva congelada. Otra parte de la verdejo vendimiada en septiembre se mantiene en cámaras de congelación a una temperatura siempre inferior a los 4ºC durante cuatro días con la finalidad de que el azúcar se concentre todo lo posible.
  3. Vendimia tardía. La tercera parte de la elaboración consiste en mantener la variedad rumana Gorda de Moldavia en el viñedo hasta su vendimia en el mes de diciembre, momento en el que su contenido de azúcar es mayor. Una vez recogida, se prensa y se obtiene un mosto con gran cantidad de azúcar.

Con el mosto procedente de esas tres elaboraciones en Javier Sanz Viticultor realizan un coupage y redondean el vino con un paso de ocho meses por barrica de roble francés de tostado medio.
Javier Sanz Viticultor explica que «junto con el trabajo de campo meticuloso y cuidado, el proceso de elaboración largo y complejo engrandece a este vino tan exclusivo que resulta sorprendentemente aromático, con recuerdos a pasas, miel, membrillo y azahar. En boca es un vino untuoso, persistente y cremoso con un atractivo dulzor».
La Colección V a la que pertenece VDulce de Invierno incluye vinos de vendimia seleccionada de Javier Sanz Viticultor y está compuesta por cuatro vinos obtenidos con especial cuidado y la mejor selección de uvas: V1863, VMalcorta, VColorado y VDulce de Invierno.

Notas de cata

Visual. limpio, brillante de color amarillo oro. Lagrima muy intensa.
Nariz. intensidad aromáticas muy alta, es un vino complejo con aroma potente en pasas, también miel, membrillo y recuerdos a flores blancas, sobre todo azahar, todo esto bien integrado con la madera. Es goloso pero no demasiado dulce.
Boca. Dulce, con una acidez bien integrada, untuoso y persistente. Con una retro nasal intensa a pasas y recuerdos de miel. Cremoso con sorprendentes y ligeros toques amargos junto un atractivo dulzor.
Para su maridaje la bodega recomienda postres dulces, hojaldres, tartas de chocolate, mousse de chocolate, pero también indica que es ideal para acompañar quesos azules como el Roquefort o La Peral.
VDulce de Invierno viene en botella de 500 ml. y tiene una producción limitada de 10.000 botellas numeradas.