La novena edición del Día Pruno triunfó con una experiencia única en plena Milla de Oro de Ribera del Duero. Los 400 asistentes, de lo que es el primer wine festival de Ribera del Duero, han disfrutado de la música acompañada de los vinos de Finca Villacreces y una gran oferta gastronómica. 

El Día Pruno se ha convertido en un evento de éxito esperado. Lo celebra Finca Villacreces y la última edición ha tenido lugar el pasdo 21 de junio, una experiencia única a orillas del Duero, entre viñedos y pinos bicentenarios que se asientan sobre un meandro del río Duero. 

Esta edición, el wine festival de Villacreces estrenó varias propuestas como Con las manos en la cepa y Taller de Barricas, que se tratan de dos iniciativas para impregnarse de la cultura del vino y descubrir los secretos de este mundo.

Asimismo, Villacreces también organizó la actividad Pintura y Vino, para aprender sobre las diferentes técnicas de la pintura para aplicarlas a las etiquetas del vino.

El evento tuvo la actuación del solista valenciano Sienna, que presentó un directo muy íntimo con temas de su último trabajo “Trance”.

Además el grupo de rock madrileño Rufus T. Firefly subió al escenario para poner el broche de oro a este día. Con la lluvia, que paró el concierto a solo media hora tras su comienzo, los madrileños decidieron hacer algo excepcional y acabar el resto del set list en un acústico dentro de la bodega, rodeados de barricas.

Asimismo, en la jornada, los asistentes disfrutaron de la música con ÓscarMina, uno de los dj’s más completos y reconocidos de la escena nacional.

De igual manera, en el evento de Finca Villacreces no puede faltar la gastronomía y ofreció diferentes platos para compartir con sus vinos, desde el pincho de lechazo a diferentes foodtrucks con hamburguesas, pulpo a la brasa y otras opciones vegetarianas.

Sin duda un día completo en un evento que celebra un vino, el icónico Pruno, que cuenta con un gran séquito de Prunolovers. Este vino vivió un momento decisivo cuando el reconocido crítico de vinos norteamericano Robert Parker le concedió una alta puntuación. A partir de aquí crece la pasión por la marca y Pruno se convierte en uno de los vinos más vendidos de la bodega.