“El vino español ya tiene la calidad, es hora de hacer el salto a la marca global», opina Javier Pagés, presidente de Barcelona Wine Week que regresa a Fira de Barcelona del 2 al 4 de febrero de 2026. Los vinos españoles tienen en esta feria un gran escaparate para seguir creciendo.

Barcelona Wine Week 2026 se posiciona como un escaparate clave y herramienta estratégica para el vino español. Del 2 al 4 de febrero en Fira de Barcelona, el salón reunirá a vinos de distintas DOs españolas, ofrecerá una gran agenda de actividades y volverá a ser el epicentro del negocio vinícola internacional.

Tecnovino- Javier Pagés, presidente de Barcelona Wine Week 2026
Javier Pagés, presidente de BWW

Como gran escaparate del vino español de calidad, el salón reunirá a las DOs españolas con los principales distribuidores y compradores internacionales para mostrar la diversidad, la calidad y la capacidad exportadora del sector español. Javier Pagés, presidente de BWW y de la D.O. Cava, explica cómo BWW es ya una herramienta imprescindible para acceder a nuevos e interesantes mercados internacionales.

Javier Pagés – La clave está en anticiparse a las nuevas demandas del consumidor, que hoy busca más calidad, autenticidad, salud y sostenibilidad. Interesa el origen, la historia que hay detrás del vino y valora productos que emocionen, que generen una experiencia singular. También es fundamental diversificar la oferta, impulsando categorías en crecimiento como los blancos, rosados y espumosos, y adoptando una comunicación moderna, tanto en canales tradicionales como digitales.

Tecnovino- Barcelona Wine Week 2026, foto de edición 2025

J. P. – Muchas de las tendencias que están marcando el sector provienen precisamente de los consumidores más jóvenes: buscan vinos más ligeros, se preocupan por la salud, la sostenibilidad, y utilizan canales digitales para informarse y comprar. BWW es un escaparate de esta transformación: en cada edición se presentan nuevos formatos, se comparten casos de éxito y se debaten ideas frescas para acercar el vino a las nuevas generaciones. Porque conectar con ellos no es una opción: es una necesidad para garantizar el futuro del sector.

J. P. – En este contexto, BWW se consolida como una cita imprescindible: es el lugar donde bodegas españolas y compradores internacionales se encuentran, se inspiran y generan oportunidades reales de negocio. Una plataforma ideal para presentar innovaciones, conectar con distribuidores, fortalecer relaciones y compartir una visión común del futuro del vino. Todo ello en un entorno profesional, atractivo y dinámico como es Barcelona.

J. P. – El vino español ha dejado de ser una alternativa para convertirse en una categoría imprescindible para cualquier importador serio. Todos quieren venir a BWW, y a Barcelona, porque saben que aquí encontrarán una oferta excelente, profesional y diversa. Las fechas, principios de febrero, son además ideales para planificar el año y cerrar acuerdos estratégicos. La respuesta internacional confirma el atractivo creciente del vino español y de la feria.

J. P. – El sector ha actuado con determinación, trasladando su preocupación a todos los niveles institucionales y políticos, poniendo en valor el peso económico, social y cultural del vino. Porque el vino español no solo genera empleo y fija población en el territorio, también es un embajador de nuestra cultura en el mundo. Estados Unidos es un mercado estratégico para los vinos de alto valor añadido, y no podemos permitirnos perder el terreno ganado.

Por eso, además de insistir en la vía diplomática, el sector promueve la diversificación de mercados como vía de resiliencia. En este sentido, BWW es una herramienta clave para abrir puertas a nuevas geografías, generar contactos estratégicos y reforzar la presencia internacional de nuestras bodegas.

Tecnovino- Barcelona Wine Week 2026, foto edición 2026

J. P. – Hoy el vino español está presente en los cinco continentes, pero siempre hay margen de crecimiento. BWW trabaja activamente para atraer compradores de los principales mercados del mundo, desde Europa hasta Asia, América del Norte, América Latina o el canal Travel Retail. Contar con esta red global en un solo espacio ofrece a las bodegas una oportunidad única para explorar nuevos destinos comerciales.

J. P. – Nuestra ventaja es clara: tenemos una diversidad y una calidad envidiables. Pero para competir al más alto nivel hace falta algo más: hay que mejorar el posicionamiento, invertir en comunicación, afinar las estrategias comerciales. Países como Francia o Italia nos llevan ventaja en estos aspectos. Ellos han sabido construir marcas colectivas potentes, y lo han hecho con unidad de acción y con respaldo institucional. Ese es el camino: colaborar, sumar, apostar por una visión compartida.

En este sentido, BWW es el mejor lugar para hacer visible lo que somos, detectar áreas de mejora y aprender de los mejores. Por eso, más que una feria, BWW es una herramienta estratégica para proyectar una imagen sólida y coherente del vino español.

J. P. – El vino es una expresión cultural: nace de la tierra, pero también de las personas. El factor humano es esencial para dotarlo de identidad, emoción y autenticidad.

Como las viñas, una marca necesita tiempo, cuidado y coherencia para desarrollarse. Por eso, la visión a largo plazo de muchas familias bodegueras es un activo invaluable: transmiten valores, saber hacer y pasión, creando cimientos sólidos para construir grandes marcas.

Más información sobre Barcelona Wine Week en este enlace.
Fechas de celebración de BWW2025: del 2 al 4 de febrero de 2026 en el Recinto Montjuïc, pabellones 1 y 8 (Barcelona).