Bodegas Arzuaga expande su visión vitivinícola a Rías Baixas con la adquisición de Pazo de Rubianes, que incluye un viñedo centenario de 25 hectáreas. Su objetivo es crear un «vino blanco que se sitúe entre los mejores del mundo», aprovechando la tradición y el terruño atlántico del Valle del Salnés.

La compra de Pazo de Rubianes en Rías Baixas por parte de Bodegas Arzuaga responde a un planteamiento en el que llevaban tiempo reflexionando con la idea de expandirse. Además del histórico Pazo de Rubianes, se suma un viñedo con más de 600 años de historia que data de 1411, aunque esta propiedad guarda aún más sorpresas.

Tecnovino- Bodegas Arzuaga compra Pazo de Rubianes en Rías Baixas

Desde Arzuaga mencionan que «esta decisión se enmarca en la apuesta por la calidad que siempre nos ha caracterizado. Queremos elaborar un vino blanco que se sitúe entre los mejores del mundo«. Y detallan que hace más de una década que llevaban valorando la posibilidad de expandir su filosofía vitivinícola y enoturística más allá de la Ribera del Duero y finalmente «nos hemos decantado por este viñedo centenario que data de 1411».

Un lugar con historia en Rías Baixas

El Pazo de Rubianes se alza en un enclave privilegiado en el municipio de Villanueva de Arousa (Pontevedra), una de las zonas más prestigiosa y bella de las Rías Baixas. Su historia se remonta a 1411 y se ha convertido en el XXI en una de las bodegas de referencia de la denominación de Rías Baixas y en uno de los emblemas del enoturismo gallego.

Tecnovino- Bodegas Arzuaga compra Pazo de Rubianes en Rías Baixas: viñdo

Por eso añaden «hemos llevado a cabo esta apuesta por Rías Baixas, una denominación de origen que mantiene una tradición milenaria basada en la viticultura tradicional y el cultivo de variedades autóctonas, con un marcado carácter atlántico. La DO Rías Baixas siempre se ha caracterizado por el minifundio extremo; ocupa 4.321 hectáreas, repartidas en más de 22.832 parcelas».

Desde 1411 y hasta la actualidad el Pazo de Rubianes ha permanecido en la misma familia, en origen y fundación con el apellido Caamaño y desde el siglo XVIII con el apellido Ozores. Al frente del mismo han estado las hermanas Beatriz y María Ozores Rey que han gestionado esta bodega convirtiéndola en una referencia en esta denominación gallega y promoviendo el enoturismo con múltiples opciones.

Un viñedo de 15 hectáreas y más atractivos

Sobre el tamaño del viñedo con el que van a contar detallan que son «25 hectáreas de viñedo para elaborar un vino blanco que se sitúe entre los mejores del mundo». Y explican que «los viñedos, cultivados en espalderas graníticas sobre laderas soleadas, capturan toda la esencia del Atlántico y el terruño único del Valle del Salnés, que es considerado la cuna del albariño. Son el alma de unos vinos de una mineralidad y frescura excepcional, un fiel reflejo del terroir».

Además desde la bodega se pronuncian sobre otro de los grandes atractivos de Pazo de Rubianes, que tiene que ver con su riqueza botánica, con sus impresionantes jardines, que forman parte de la Ruta de la Camelia, ya que posee más de 5.000 camelios, bien custodiados por magnolios, calocedros, alcanfores, fresnos, robles, alcornoques y eucaliptos.