El acuerdo europeo sobre el Paquete Vino ofrece herramientas flexibles para el sector. La reforma garantiza estabilidad en autorizaciones de viñedo, mejora ayudas a la promoción y clarifica el etiquetado. Se espera su adopción formal en enero o febrero de 2026.

Las denominaciones de origen de vino han valorado de forma muy positiva el resultado del diálogo político tripartito entre la Comisión Europea, el Parlamento Europeo y el Consejo sobre el Paquete Vino, que concluyó el pasado 4 de diciembre con un acuerdo sobre el texto final. Tras este paso, solo resta la adopción formal por parte del Parlamento y del Consejo y su publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea, prevista entre enero y febrero de 2026.

Tecnovino consumo de vino en Espana exportaciones

Qué supone este acuerdo

El acuerdo alcanzado ofrece a los Estados miembros y a los órganos de gestión de las denominaciones de origen un conjunto de herramientas voluntarias y flexibles para afrontar los retos del sector vitivinícola, evitando mecanismos universales u obligatorios. Esta reforma permitirá aplicar instrumentos adaptados a las necesidades nacionales y regionales, asegurando estrategias más eficaces y específicas en cada Estado miembro.

Las denominaciones de origen de vino consideran especialmente positivas las mejoras aplicadas en el sistema de autorizaciones de viñedo, en determinadas ayudas de los planes estratégicos y en el etiquetado.

En este sentido, el sistema de autorizaciones de viñedo pasa a ser estable en el tiempo, eliminando la fecha de expiración prevista para 2045 y estableciendo revisiones cada diez años. Además, se contempla la posibilidad de crecimiento cero en nuevas plantaciones si la situación del mercado lo requiere y se incorporan nuevas flexibilidades que permitirán a los Estados miembros actuar con mayor rapidez en situaciones de urgencia o necesidad sin esperar a la aprobación de reglamentos delegados por parte de la Comisión Europea. Asimismo, las denominaciones de origen verán reforzados sus criterios para recomendar limitaciones de nuevas autorizaciones o restricciones de replantaciones en sus zonas.

Tecnovino- Acuerdo europeo sobre el Paquete Vino

En materia de ayudas al sector del vino, en promoción, las tasas de cofinanciación públicas para promocionar el vino en terceros países aumentarán (pasan del 50 al 60% como tope, con posibilidad de que las complemente el Estado Miembro con fondos nacionales, alcanzando así un porcentaje superior), como también aumentará la duración máxima para que un mismo beneficiario pueda realizar un programa de promoción en un tercer país con ayuda de la UE (esa duración máxima pasará de 5 a 9 años). Asimismo, subirán también los porcentajes de cofinanciación, pudiendo llegar al 100% de los gastos subvencionables, en medidas para prevenir las enfermedades del viñedo, así como en otras relativas a la adaptación y lucha contra el cambio climático.

Además, las normas de etiquetado serán más claras y coherentes. El vino “desalcoholizado” y “parcialmente desalcoholizado” pasará a designarse como vino reducido en alcohol y sin alcohol, respectivamente, términos que el consumidor comprende e identifica más fácilmente.

CECRV y EFOW agradecen a las instituciones europeas, y especialmente a las personas que han liderado la tramitación de esta importante reforma para el sector del vino (el Comisario de Agricultura, Christophe Hansen, la ponente principal del Parlamento Europeo para esta reforma, Esther Herranz García, y la presidencia danesa de la UE), su compromiso constructivo para llevarla adelante de manera rápida, dando respuesta así a las necesidades del sector. Destacan además el inclusivo enfoque con el que han actuado las instituciones europeas en este proceso de reforma, desde las bases de la misma, con la puesta en marcha en otoño de 2024 del Grupo de Alto Nivel para la Política Vitivinícola marcó un momento decisivo, reuniendo, a la vez, a las instituciones de la UE y a las organizaciones sectoriales por primera vez en casi dos décadas para hacer frente a los retos estructurales del sector: la sobreproducción, la necesidad de crear valor, el creciente impacto del cambio climático y las cambiantes expectativas de los consumidores.

Sobre estos aspectos, David Palacios Algarra, presidente de CECRV, explica que “este acuerdo supone un paso adelante para el sector en general y para las denominaciones de origen en particular, porque atiende necesidades concretas y permite contar con herramientas más ágiles y más eficaces para poder gestionar mejor nuestra producción, para mejorar la promoción de nuestros vinos y para que el consumidor valore y conozca mejor también la diversidad de nuestros productos”.

Por su parte, Riccardo Ricci Curbastro, presidente de EFOW, declara que “con este acuerdo se demuestra que, cuando las instituciones y las partes interesadas trabajan juntas, Europa puede ofrecer soluciones significativas y equilibradas para su régimen vitivinícola”.