La lucha contra el cambio climático mediante la recuperación del suelo agrícola ha sido acogida por Bodegas Alconde que acaba de iniciar su transición a la viticultura Regenerativa. Este innovador sistema de abordar la elaboración del vino llega a la Denominación de Origen Navarra a través de un proyecto pionero auspiciado por la Unión Europea mediante el organismo EIT Food y en el que en el panorama nacional se han seleccionado solo cinco bodegas.

Bodegas Alconde inicia su transición a la viticultura regenerativa, que promueve la lucha contra el cambio climático mediante la recuperación del suelo agrícola. Y es que el sector de la agroecología emite casi un tercio de las emisiones globales a la atmósfera, por ello la sostenibilidad es parte de la agenda de muchas de las bodegas españolas. En este contexto la viticultura regenerativa busca que el viñedo recupere su biodiversidad y fertilidad mediante métodos exclusivamente naturales.

Tecnovino, Bodegas Alconde, viticultura regenerativa
El viñedo navarro inicia, de la mano de bodegas Alconde, la transición hacia la viticultura regenerativa, un sistema innovador y sostenible

Así, 42 hectáreas de viñedo en Lerín (Navarra) participan en un programa pionero auspiciado por la Unión Europea y para el que solo se han seleccionado 5 bodegas españolas. La primera fase del proyecto dura tres años, en los cuales Bodegas Alconde deberá demostrar ante el organismo evaluador una serie de mejoras continuadas año tras año. Para tener claro el punto de partida y controlar los resultados del plan, se han llevado a cabo las primeras mediciones del suelo.

Además de ser pionera en implantar en Navarra este innovador sistema, Bodegas Alconde ha entrado recientemente a formar parte de la Asociación de Viticultura Regenerativa impulsada por la Familia Torres.

Marcos Gorricho, gerente de Bodegas Alconde, ha querido explicar que este proceso «va a preparar el suelo para favorecer que se vuelva a implantar la flora y fauna autóctonas. Posteriormente se integrarán más elementos de la flora y la fauna silvestre para que nuestros viñedos recuperen su biodiversidad natural. Es un paso más allá hacia el objetivo de que nuestro agrosistema se parezca tanto como sea posible a un bosque».