Se ralentiza la disminución de la superficie de viñedo mundial, el cambio climático afecta a la producción de vino negativamente, el consumo cambia ante diferentes hábitos sociales y estilos de vida, los volúmenes y valores de comercio internacional siguen estables… Estos son algunas de las conclusiones que se extrapolan del informe que ha elaborado la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) sobre la situación del sector en el año 2024.

Tecnovino datos del sector del vino OIV, viñedo

Con el fin de ilustrar la situación del sector en el año 2024, la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) ha ofrecido estadísticas sobre la producción, el consumo y el comercio de más de 180 países, tanto productores como consumidores. Al dar a conocer los datos mundiales del sector , OIV destacó la necesidad de reforzar la cooperación multilateral y adaptarse a los cambios.

Los datos ponen de relieve los efectos del cambio climático, la evolución de las preferencias de los consumidores y la incertidumbre geopolítica que afecta al sector.

El director general de la OIV, John Barker, señaló que estos efectos representan un desafío de adaptación para el sector vitivinícola, aunque también pueden traducirse en oportunidades si se gestionan con éxito. Esa visión positiva la expresó así: Trabajar conjuntamente para desarrollar soluciones frente al cambio climático y convertir al vino en un referente de sostenibilidad; invertir en investigación sobre nuevos consumidores para comprender su visión del vino; fortalecer el multilateralismo y el comercio mundial: estos son los pilares que harán avanzar al sector vitivinícola«. En este sentido destacó que «la OIV desempeña un papel clave como referencia mundial en materia de viña y vino, reuniendo a 51 países para fomentar la cooperación, la armonización y el intercambio de conocimientos sobre los principales retos y oportunidades clave del sector”.

El descenso de la superficie de viñedo mundial se suaviza

En los últimos cuatro años, se registra una disminución de la superficie vitícola mundial. En 2024, se alcanzan los 7,1 millones de hectáreas, con una caída del 0,6 %, lo que refleja una desaceleración del ritmo de reducción. La tendencia a la baja se atribuye al arranque de viñas en las principales regiones vitivinícolas, aunque algunos países muestran una dinámica de expansión de sus viñedos.

Tecnovino superficie de viñedo ecológico España Oive
Foto: OIVE

En el caso de España, el mayor viñedo del mundo, cuenta con 930.000 ha en 2024 y ha disminuido
en un 1,5% (equivalente a 14,5 mieles de ha) en comparación con 2023.

El cambio climático lastra la producción mundial de vino

En 2024, la producción mundial de vino se estima en 226 millones de hectolitros, lo que supone el descenso más significativo de los últimos 60 años y una caída del 5 % respecto a 2023. La caída puede atribuirse a una serie de eventos meteorológicos extremos e impredecibles en ambos hemisferios ocasionados por el cambio climático.

La producción de la Unión Europea en 2024 se estima en 138,3 mhl, lo que supone un descenso de
3,5% respecto a 2023. Esto representa el volumen de producción de más bajo registrado desde principios del siglo, por detrás incluso de 2017 (141,5 mhl). Los datos de 2024 ponen de relieve el importante impacto del cambio climático en las regiones vitivinícolas de la UE, con viñedos enfrentados a una amplia gama de perturbaciones climáticas. Mientras que algunas zonas experimentaron
graves sequías y estrés hídrico, otras se vieron afectadas por fuertes lluvias y tormentas destructivas sin precedentes. Estas condiciones meteorológicas extremas han provocado un aumento de la presión de las enfermedades, daños en los viñedos y unas condiciones de cultivo de la uva difíciles. Estos impactos se distribuyeron de forma desigual y algunas regiones se beneficiaron de unas condiciones meteorológicas relativamente favorables, con lo que obtuvieron unos volúmenes medios de cosecha

En Asia, China es el mayor productor de vino, con un volumen estimado para 2024 en
de 2,6 mhl, lo que supone una reducción de 17,0% respecto al año anterior.

En EE.UU., cuarto productor mundial de vino, la producción de vino en 2024 se estima en 21,1 mhl, marcando un descenso del 17,2% respecto a 2023 y un 15,5% por debajo de la media quinquenal. El calor extremo y las presiones sobre los inventarios llevaron a uno de los niveles de producción más bajos de los últimos 15 años. Cabe destacar que la cosecha de uva de California ha sido la más pequeña desde 2004.

El hemisferio sur registró una producción históricamente baja por segundo año consecutivo. Atribuida a fenómenos climáticos extremos en las principales regiones productoras de vino, la producción vinificada de 2024 descendió a 45,8 mhl, lo que supone un descenso del 3,6% respecto a 2023 y una caída del 13,8% respecto a la media quinquenal. Esto representa el nivel de producción más bajo de los últimos veinte años. Sólo se registraron volúmenes inferiores a principios de el siglo, cuando el viñedo del hemisferio sur tenía un tamaño aproximadamente un 15% menor. La mayoría de los países sudamericanos han registrado volúmenes de producción comparativamente bajos en 2024.

Tecnovino producción mundial de vino OIV

Nuevos patrones de consumo y diversidad de mercados

El consumo mundial de vino en 2024 se estima en 214,2 millones de hectolitros, registrando una disminución del 3,3 % en comparación con 2023. De confirmarse esta estimación, supondría el volumen más bajo registrado desde 1961.

Esta situación responde a una combinación de factores económicos y geopolíticos que generan inflación e incertidumbre, así como a la contracción de los mercados maduros, influenciada por cambios en los estilos de vida, hábitos sociales y comportamiento de consumo entre generaciones.

No obstante, en 195 países, el vino alcanza niveles de consumo sin precedentes. Se destacó, asimismo, que algunos países, con un elevado consumo general y una población numerosa, aún muestran un considerable margen de crecimiento.

Equilibrio entre la producción y la demanda

Aunque persisten las caídas en la producción y el consumo, se prevé que el equilibrio del mercado global se mantenga en 2024, dado que la producción probablemente no superará la demanda, en línea con lo ocurrido con la escasa cosecha de 2023.

Tecnovino viticultura ecológica OIV detalle

Dos años consecutivos de baja producción podrían contribuir a estabilizar el mercado, aunque es probable que los niveles de existencias sigan siendo desiguales entre regiones.

Comercio internacional: se mantienen volúmenes y valor

El volumen de exportaciones mundiales de vino se mantuvo en 99,8 millones de hectolitros. Por su parte, el valor de las exportaciones mundiales de vino tuvo una ligera caída del 0,3 % hasta alcanzar los 36 000 millones de euros, pero se mantiene en un precio medio de exportación históricamente alto de 3,60 euros por litro.

La inflación y la escasa oferta siguen impulsando los precios elevados en comparación con los años previos a la pandemia (casi un 30 % más altos).

Bajos volúmenes de producción en 2023 y 2024, altos precios medios de exportación y debilitamiento de la demanda internacional en 2024. El volumen mundial de exportaciones de vino desde 2010, con un total de 99,8 millones de hectolitros, supone un ligero descenso del 0,1% respecto a 2023. Algunos grandes exportadores mostraron signos de recuperación tras el importante descenso en 2023, entre ellos Chile (+1,0 mhl), Australia (+0,4 mhl), Portugal (+0,3 mhl) y Estados Unidos (+0,3 mhl). Mientras tanto otros países mostraron una tendencia a la baja en 2024, como España (-0,9 mhl), Canadá (-0,2 mhl) y Alemania (-0,2 mhl).

En 2024, el valor mundial de las exportaciones de vino se estima en 35.900 millones de euros, lo que representa solo un ligero descenso del 0,3% en comparación con el elevado nivel registrado en 2023.

OIV señala que del mismo modo, el precio medio de exportación se mantuvo estable en 3,60 euros por litro, mostrando un descenso marginal del 0,3% a partir de 2023. Sin embargo, es importante señalar que, aunque la variación anual a partir de 2023 es baja, el nivel general de precios en 2024 sigue siendo relativamente alto. Este resultado procede de una combinación de varios factores. Por un lado la tendencia a la premiumización iniciada hace algunas décadas se ha acentuado en los últimos años. Por otro, la convergencia de los bajos volúmenes de producción y las persistentes presiones inflacionistas mundiales en los últimos años ha contribuido significativamente a los elevados niveles de precios observados en comparación con el periodo prepandémico.