El icónico Grand Siècle de Laurent-Perrier es un vino de Champagne que desafía la tradición con su enfoque innovador en el arte del ensamblaje. Combinando varias añadas excepcionales, esta joya enológica alcanza la perfección que la naturaleza por sí sola no podría proporcionar, ofreciendo una experiencia única y enriquecedora con cada sorbo.

En el mundo del champagne, donde cada cosecha es única y muestra sus propias características, Laurent-Perrier ha revolucionado la idea tradicional de la añada con su icónico Grand Siècle. Mientras en Champagne el término «millésimé» suele ser sinónimo de excelencia para las cuvées de prestigio, en esta casa se ha apostado por el «arte del ensamblaje» para alcanzar la añada perfecta, algo que la naturaleza por sí sola no podría proporcionar.

El origen del champagne Grand Siècle

La historia de Grand Siècle se remonta a 1959, cuando Bernard de Nonancourt, al tomar las riendas de Laurent-Perrier, tuvo la visión de crear un vino de champagne sin precedentes. Observando la diversidad de los millésimés, comprendió que la perfección que anhelaba no podría alcanzarse con una única cosecha excepcional, sino mediante la combinación magistral de varias añadas complementarias.

Tres añadas entran en la ecuación

El proceso de elaboración de Grand Siècle por parte de Laurent-Perrier se rige por principios inmutables, que han asegurado su grandeza a lo largo del tiempo:

• Se seleccionan tres añadas excepcionales que se complementan entre sí, eligiendo aquellas que reflejen lo mejor de Laurent-Perrier.
• Cada una de estas añadas se compone principalmente de chardonnay, complementado con pinot noir, provenientes de un selecto grupo de 11 Grands Crus cuidadosamente escogidos entre los 319 Crus de la región de Champagne.
• El vino pasa por una crianza prolongada en bodega, en contacto con sus lías, durante 10 años para las botellas de 75 cl, y aún más tiempo para las botellas magnum de 150 cl.

Ensamblaje de las añadas

La forma en la que se han ensamblado las añadas de este Grand Siècle es como sigue:

• 2012 – 65%: las heladas invernales y primaverales repercutieron en los rendimientos, que fueron más bien moderados. El verano seco y soleado ha producido vinos de gran finura con chardonnays y pinot noirs elegantes y equilibrados con aromas de frutas rojas.
• 2008 – 25%: el verano fresco y soleado produjo vinos complejos con buena estructura para una añada excepcional. Los chardonnays son de gran calidad y los pinot noirs poseen una profunda riqueza aromática.
• 2007 – 10%: una primavera estival, cuyos efectos fueron mitigados por un verano mixto, reveló vinos francos y de gran frescura que se mantendrán en el tiempo, con chardonnays con aromas complejos de fruta blanca y cítricos y pinot noirs con aromas de fruta amarilla.

Más características:

• Uvas: chardonnay 58% – pinot noir 42%.
• CRUS: Elaborado a partir de una selección de 8 de los 17 Grands Crus de chardonnay y pinot noir.
• Chardonnay: Le Mesnil-sur-Oger, Oger, Cramant, Avize.
• Pinot Noir: Tours-sur-Marne, Ambonnay, Bouzy, Verzy.
• Envejecimiento: 10 años sobre lías.
• Formato: 75 ml.