Lanzarote hace historia con su vendimia de invierno, repite tras la primera realizada el año pasado con la malvasía volcánica. La edición limitada de 2023 revela un vino complejo y auténtico que representa la sostenibilidad y el carácter único de la isla.
El Grifo está llevando a cabo en la isla de Lanzarote una gesta vitivinícola al poner enmarcha una vendimia de invierno. La primera fue la vendimia de invierno en 2022, recogiendo 3.600 botellas de un vino que se convirtió en un auténtico tesoro. En este pionero proceso, la uva malvasía volcánica maduró durante el invierno y fue cosechada el 6 de abril de 2022, marcando un hito en la lucha contra el cambio climático y en la búsqueda de prácticas vitivinícolas sostenibles.
Impulsado por la calidad excepcional de aquel primer vino de invierno y su importancia en el contexto medioambiental, El Grifo decidió repetir la hazaña en 2023, lo que ha resultado en la producción de una edición limitada de 2.262 botellas, que desde la bodega valoran que seguramente se convertirán en piezas de colección.
En ambos casos, la elección de la malvasía volcánica como uva fue crucial. En el proyecto inicial, liderado por el viticultor Francisco Raimundo en su finca Playa Quemada, en Yaiza, se aprovecharon las cotas bajas y las temperaturas estables de la isla para alterar el ciclo de la vid, asegurando una maduración óptima en marzo y abril. Este éxito inspiró a otros viticultores, y en la vendimia de invierno de 2023, se sumaron viñedos de diferentes regiones de la isla, como el Norte, Geria, Playa Quemada, Cuchillo y Masdache.
La naturaleza, siempre impredecible, dictó el momento de la cosecha. Mientras que en 2022 la uva se recogió el 6 de abril, en 2023 se adelantó al 15 de febrero, subrayando la importancia de respetar el ritmo natural y la madurez de la uva.
Vendimia de invierno 2023 de El Grifo, un blanco complejo con carácter
El vino resultante de la vendimia de invierno 2023 es amarillo pajizo, con un aroma donde domina el carácter varietal de la malvasía volcánica, que despliega notas de rosa, azahar, corteza de naranja, guayaba y sutiles toques de cereza y guinda derivados de la fermentación intracelular. También se perciben matices vegetales como el hinojo y el eucalipto.
En boca, este vino se muestra sorprendentemente complejo, con un profundo carácter. Su salinidad evoca su origen cercano al Atlántico, y se hacen evidentes las notas maduras de albaricoque, que ya se insinuaban en la nariz.
El futuro promete aún más. Después de comprobar el rendimiento y la calidad de los viñedos, si en la primera vendimia de invierno se actuó en 2.500 metros, en 2024 se espera hacerlo en media hectárea.
Así nuevos viticultores creen firmemente en este futuro sostenible que ya no es lejano. Desde la bodega destacan que se trata de aprender cómo se puede elaborar el vino cuando cada zona lo demande y el profundo conocimiento de los viticultores es tan importante como el del equipo de enólogos.
Este vino blanco poderoso no solo es un logro en términos de sostenibilidad y adaptación al clima de Lanzarote, sino que también es una expresión única del territorio y la cultura de la isla. El proyecto, liderado por El Grifo, la bodega más antigua de Lanzarote y su asesor Xabier Kamio, avanza con éxito en la dirección correcta, mostrando la posibilidad de elaborar vinos frescos y auténticos que reflejan las particularidades de esta región.
PVP de Vendimia de invierno El Grifo : 38,20 euros. Disponible en la tienda online de la bodega.
