Finca La Emperatriz Reserva 2014 procede de una añada en la que las condiciones meteorológicas provocaron a la bodega un exhaustivo trabajo en viñedo de selección de racimos. La temprana brotación, las lluvias del verano y otoño y el calor de septiembre de 2014 marcaron una añada que dado a la luz un vino que ya goza del favor de Luis Gutiérrez al conseguir 93 puntos Parker.

Tecnovino Finca La Emperatriz Reserva 2014Acaba de ver la luz la nueva añada 2014 de Finca La Emperatriz Reserva, uno de los vinos clásicos de los hermanos Eduardo y Víctor Hernáiz. Son 42.000 botellas de 75 cl. elaboradas con uvas de cepas cultivadas en vaso, con una edad media de 45 años y unos rendimientos de 4.500 kg/ha.
En la añada 2014 la bodega realizó una selección de racimos en viñedo para asegurar la calidad del vino, en un año en que la meteorología condujo a rendimientos más altos de lo habitual, incluso en Rioja Alta, donde se ubican los viñedos de propiedad con que se elaboran todos los vinos de Hermanos Hernáiz.
Son ya 15 añadas las que lleva este vino a sus espaldas desde que salió al mercado el Reserva 2000, un momento en que los Hernáiz buscaban una renovación del estilo tradicional de la zona. Quince años después, la bodega ha conseguido ganarse a crítica y público con su particular manera de hacer, con vinos que, aun ajustándose a los imperativos que marca la clasificación de crianzas en la DOCa Rioja, consiguen escapar al corsé y lucir un perfil de modernidad que se ajusta muy bien a la personalidad de sus propietarios.

Serio, equilibrado y muy bien integrado

Finca La Emperatriz Reserva 2014  es un vino que responde a los ensamblajes tradicionales, donde la predominancia mayoritaria del Tempranillo viene secundada por los aportes de Garnacha, Viura y Graciano, y que permanece 24 meses en barrica de roble americano en un 70%, el restante 30% es francés.
Consigue ser un vino donde la buena integración de la madera permite frescura y aromas de fruta negra, tras un color de cereza intenso. En nariz aparecen también notas de regaliz y pimienta negra sobre un fondo especiado y balsámico.
En las palabras de Luis Gutiérrez para The Wine Advocate, donde le otorgaba 93 puntos, se considera un vino «serio, equilibrado y muy bien integrado, con el roble perfectamente rendido a la fruta, sutil y elegante».
Todo ello responde a una forma de entender el vino donde el criterio de la propiedad marca las maneras de hacer y el perfil de los vinos que se elaboran. Porque el vino debe expresar el terruño del que procede, pero también a las personas que están detrás.