El vino, el cava y los licores tienen un protagonismo indiscutible en las cestas de Navidad. Son un elemento imprescindible que marca la diferencia y que aporta a los lotes de empresa un atractivo especial. Cualquier cesta que se precie, por sencilla que sea, debe incluir un buen vino con el que acompañar las comidas familiares y entonces surgen las dudas: ¿qué elegir?, ¿cómo sorprender a empleados y colaboradores?

¿Qué vino elegir para la cesta de Navidad? Por supuesto hay que incluirlo, no puede faltar. En las cestas de Navidad económicas suele haber un vino tinto, generalmente un crianza, pero si queremos ir más allá podemos jugar con el maridaje.

Tecnovino vino para la cesta de navidad

Combinar los alimentos del lote navideño con las bebidas adecuadas puede hacernos ganar puntos y siempre va a satisfacer los paladares más exigentes.

Armonizar el sabor de los alimentos con el vino ideal requiere un cierto conocimiento de la materia. Por eso hemos elaborado una pequeña guía de maridajes, que servirá para confeccionar con criterio las mejores cestas de Navidad para empresas. Y no es preciso un presupuesto muy elevado; se pueden crear lotes baratos perfectamente maridados. 

Jamón, quesos, dulces y conservas: ¿cómo maridarlos?

Las cestas de Navidad más completas suelen incluir un jamón, embutidos, alguna variedad de queso, dulces y alimentos en conserva. Cada uno va a requerir un acompañamiento concreto, que realzará su sabor y añadirá atractivo a cada bocado.

  • Jamón ibérico de bellota: el jamón suele asociarse con el vino tinto, pero esa no es la única opción. Para disfrutar plenamente de un jamón de bellota hay que atreverse con otras propuestas, como los vinos secos de Jerez, Málaga o Montilla. También funcionan bien los tintos jóvenes. Lo mismo ocurre con los embutidos y chacinas; casan a la perfección con los finos y los amontillados y en general combinan bien con los rosados y tintos afrutados.
  • Quesos: la regla más extendida entre los consumidores es la de combinar los quesos con los vinos propios de cada región. Aparte de esa tendencia, hay que decir que el queso marida muy bien con los vinos blancos. En el caso de los quesos frescos o blandos se recomiendan los rosados y si hablamos de quesos duros o extragrasos, lo mejor son los tintos de crianza. Para los quesos con corteza enmohecida se recomienda el cava y en un capítulo aparte están el roquefort, el gorgonzola o el cabrales. Estos quesos fermentados pueden acompañarse con vinos dulces o espumosos secos.
  • Dulces: los turrones, mazapanes, roscos, pestiños y otras especialidades navideñas suelen maridarse con vinos dulces, elaborados con las variedades Pedro Ximénez y moscatel. Tampoco hay que olvidar los vinos de Montilla y de Jerez. Y para rematar la comida una buena opción es un chupito de orujo.
  • Conservas: los patés variados y el foie gras están cada vez más presentes en los lotes de Navidad. Suelen maridarse con vinos blancos, pero también combinan muy bien con los vinos dulces, en especial con el moscatel.

Con estas pautas de maridaje, las cestas de Navidad para empresas pueden adquirir una especial relevancia. Son detalles que aportan un valor añadido al producto y que todos los empleados y colaboradores seguro que van a saber apreciar.