Con un viñedo situado a 1.000 sobre el nivel del mar, la bodega en la zona más desconocida de Ribera del Duero elabora un vino vivo, expresivo, fresco, aromático y longevo.

La bodega Dominio Basconcillos, ubicada a unos 1.000 metros sobre el nivel del mar con una orientación sur en la zona noreste más desconocida de la Ribera del Duero, produce un vino de altura único.

El vínculo con la naturaleza y por la tierra ha guiado a esta bodega desde sus inicios. Tras dos décadas trabajando el viñedo de forma natural, y con el certificado ecológico desde el 2004, la finca se ha convertido en un refugio de biodiversidad.

Características de los vinos en altura

Cabe destacar que se consideran vinos en altura aquellos cuya superficie está por encima de los 800 metros sobre el nivel del mar. La altitud, por su parte, afecta en aspectos como la temperatura, con tendencia a temperaturas inferiores a la de terrenos con menos altitud y con una diferencia pronunciada entre el día y la noche, o la intensidad de la luz, con una mayor radiación solar directa y un aire más puro.

De este modo, esta posición les otorga un valor diferencial, siendo el resultado un vino más vivo, más expresivo, más fresco, más aromático y longevo.

Un paraje único para la elaboración de un vino con identidad propia

La peculiaridad de la altura del viñedo de bodega Dominio Basconcillos, su exposición sur, orografía del terreno, su diversidad de suelos (arcillo-calcáreos, grava y arena), las diferencias de temperatura entre el día y la noche, la ventilación y pureza del aire y los rendimientos muy bajos (menos de 4000 kg/ha) hacen que las condiciones de esta bodega del conocido como Paraje del Alto del Cura, tenga unas características únicas.

De hecho ya en la Edad Media los monjes Benedictinos trajeron a esta zona el cultivo de la uva alrededor de su monasterio.

La bodega, fundada a finales de los años 90 por José María Basconcillos, y que hoy regentan sus hijas María José y Carmen Basconcillos, está inspirada en los Châteauxes franceses, con una distribución única donde bodega y viñedo forman una unidad.