Todo lo que le rodea es singular, único, exclusivo; desde su nacimiento de alta cuna en el Pago de Santa Cruz, uno de los pagos más valorados de DO Ribera del Duero hasta su vendimia y selección manual. Así es Ferratus Sensaciones el vino de Ribera de Duero que no deja indiferente: puro estímulo.

Nacido a 900 metros de altitud, fruto exclusivo de cepas viejas ubicadas en el Pago de Santa Cruz, uno de los pagos más envidiados de la DO Ribera del Duero, Ferratus Sensaciones es una explosión de aromas que no deja indiferente a nadie.

Un vino es especial cuando todo lo que le rodea es singular, único, exclusivo. Y todo esto lo reúne Ferratus Sensaciones, un Ribera del Duero que puede presumir de nacimiento de alta cuna, pues toda la uva utilizada en su elaboración procede de un viñedo único en el Pago de Santa Cruz, en La Horra (Burgos), 3 hectáreas propiedad de la bodega.

¿Qué tiene de especial este terruño? Una altitud de 900 metros, viñas de entre 60 y 80 años dispuestas en ladera, unas barreras naturales de protección climatológica y un suelo que aporta unas notas características a las uvas que maduran en él: todo lo necesario para crear un vino de enorme personalidad.

Hablamos de cepas de producciones muy bajas y racimos de bayas pequeñas que son recogidos manualmente en cajas de 15 kg. y llevados a la bodega con exquisito mimo, donde se hace una primera selección de racimos en mesa, para pasar a una segunda mesa de selección donde ya se escogerán las uvas grano a grano.

Una vez elaborado, Ferratus Sensaciones descansa un mínimo de 16 meses en barricas nuevas de roble francés, de bosques y tostados meticulosamente seleccionados por el enólogo de la bodega. Permanece en botella de 4 a 5 años antes de salir al mercado. Es el ejemplo perfecto de un vino de larga guarda.

Cada añada es única (la naturaleza perfila cada cosecha) y en la elaboración se juega con la intuición y la creatividad, aunque también la precisión: nada se deja al azar.

Notas de cata

Impresiona la profundidad de su capa y la majestuosidad de su color. Al servirlo densas lágrimas de glicerina caen lentamente por el interior de la copa, como en una carrera inversa en la que la ganadora sea la última en llegar.

En nariz se siente una explosión de frutas del bosque, arándanos y violetas y se aprecian notas de chocolate y tabaco consecuencia de su paso por barrica, con un toque de mineralidad muy característico de Ferratus Sensaciones y procedente del especial terruño que es el Pago de Santa Cruz.

En boca es un vino con volumen, estructurado, completo y largo, equilibrado y graso, que transmite mucho. En resumen: es puro estímulo. Producción limitada: 6.700 botellas numeradas de 0,75 l. Se recomienda decantar o airear previamente. PVP: 30 €

Una experiencia singular: vino & chocolate

Ferratus es una bodega boutique que plantea su enoturismo como una experiencia singular que no dejará indiferente a nadie.

A partir de ahora, las tardes del primer sábado de cada mes de 17 a 19 horas pueden ser especiales para quienes concierten una visita a Ferratus, pudiendo compaginarla con el turismo gastronómico de Aranda de Duero (Burgos) dado que la bodega está apenas a 11 kilómetros del centro de la capital Ribereña.

La experiencia es singular porque, además de conocer las instalaciones y explicar los secretos de la elaboración, los visitantes participarán en una exclusiva cata de sus tres vinos tintos, Ferratus AØ, Ferratus Origen y Ferratus Sensaciones, con una armonía de Chocolates de Grand Cru de la prestigiosa marca francesa Valrhona. Guiados por personal de la bodega y con material didáctico preparado para ello, los visitantes disfrutarán de una manera diferente y original de catar sus grandes vinos.

Las visitas serán concertadas con antelación y se podrán reservar a través del correo electrónico bodega@nullferratus.es y del teléfono 638 007 140. El aforo es muy limitado y se cumplirán estrictas medidas de seguridad sanitaria.