La empresa familiar jerezana González Byass cierra el ejercicio fiscal 2022-2023 con unas ventas brutas de 331 millones de euros y un ebitda de 25,1 millones de euros. Estas cifras representan los sólidos resultados económicos alcanzados por el grupo bodeguero.

González Byass ha cerrado el ejercicio fiscal con un crecimiento del negocio en España y una ligera caída internacional, que representa el 71% del total, debido a los mercados asiáticos. Por otro lado, como en el ejercicio fiscal anterior, las ventas netas han alcanzado los 240 millones de euros. Además, las tensiones inflacionistas sufridas en los costes han provocado una reducción del ebitda del 11%, alcanzando los 25,1 millones de euros, frente a los 28,2 millones de euros de 2022.

Tecnovino Gonzalez Byass Real Bodega de la Concha

En Vinos y Spirits, ha jugado la baza de la diversificación geográfica. América ya representa el 40,5% de la facturación y de negocios, así como el comportamiento de varias de sus marcas emblemáticas, como los brandies y vinos de Casa Pedro Domecq; su gama de jereces que incluye marcas como Tío Pepe, Croft y Viña AB, y los vinos blancos y cavas de las bodegas Viñas del Vero, Lusco y Vilarnau.

La actividad enoturística también ha contribuido a que González Byass alcance estos resultados. Cabe destacar “Veranea en la Bodega”, el ciclo estival celebrado en sus bodegas de Jerez por el que pasaron más de 64.000 personas en su última edición.

Sostenibilidad en la viña

La sostenibilidad ha protagonizado varios hitos de la marca. El primero, la evolución de su anterior programa medioambiental hacia “People + Planet”, su nuevo plan centrado en el cuidado de las personas y del planeta.

Por su parte, “Ángel del Viñas”, la iniciativa que González Byass desarrolla para ayudar a recuperar y conservar viñedos viejos en España, ha llegado a dos nuevas regiones vitivinícolas: la Alpujarra granadina y la isla de La Palma.

Por último, la renovación del certificado “Sustainable Wineries for Climate Protection por parte de González Byass Jerez, Beronia Rioja, Vilarnau y Viñas del Vero. A estas cuatro bodegas se les suma Beronia Rueda, la quinta en alcanzar este sello sostenible creado por la Federación Española del Vino (FEV).

En cuanto a la I+D+i, que es fundamental para desarrollar unos procesos óptimos y eficientes, destaca su participación en prestigiosos programas de investigación de ámbito europeo y español.

Entre ellos se encuentran Fuelphoria, que aborda en Viñas del Vero el reto de la captura, compresión y almacenamiento del CO2, así como Sherry Up y Emboterez, dirigidos a mejorar y optimizar la vinificación y el embotellado de los vinos.

González Byass sademás e compromete a priorizar, inicialmente, los siguientes Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) del Pacto Mundial de las Naciones Unidas: educación de calidad, trabajo y crecimiento económico, acción por el clima y vida en la tierra.