Con Nivarius Tempranillo Blanco, la firma riojana de elaboración exclusiva de vinos blancos, Bodegas Nivarius (perteneciente al Grupo Palacios Vinoteca), comienza su colección de monovarietales. Se realiza con 100% con uva de esta variedad autóctona riojana, una mutación genética natural surgida en los años 80.

Tecnovino Nivarius Tempranillo Blanco Bodegas Nivarius Palacios Vinoteca 1
El Grupo Palacios Vinoteca en su firme apuesta por los vinos blancos, presenta el primer vino de la colección de monovarietales de variedades de blanco de Bodegas Nivarius, Nivarius Tempranillo Blanco.
Nivarius Tempranillo Blanco es un vino elaborado al 100% con uva de esta variedad autóctona riojana, una mutación genética natural surgida en los años 80 a partir de un solo sarmiento de una cepa de Tempranillo Tinto. Esta variedad produce uvas de una acidez excepcional aptas para elaborar vinos blancos con personalidad propia, como es este vino. Su racimo es de tamaño mediano y suelto y con la uva de forma ligeramente aplastada.
Las uvas para la elaboración de Nivarius Tempranillo Blanco, proceden de viñedos de las zonas frías de Nalda (La Rioja), ubicados en la parte alta, a unos 700 metros, en suelos pobres orgánicamente y orientados hacia el norte. Estas características, según la firma, «son únicas y diferenciadoras para la elaboración del vino blanco de Bodegas Nivarius, ya que se obtienen uvas con gran acidez, frescura y carácter frutal».
Tecnovino Nivarius Tempranillo Blanco Bodegas Nivarius Palacios Vinoteca 2Nivarius Tempranillo Blanco se fermenta y cría sobre sus lías en foudres de roble francés de 3.500 litros, donde permanece durante siete meses en una crianza con battonages periódicos que aporta al vino «una gran untuosidad, potenciando la mineralidad y redondeando el tanino, característico de esta variedad blanca única de la zona».
Las 9.309 botellas elaboradas de Nivarius Tempranillo Blanco están numeradas.

Nota de cata de Nivarius Tempranillo Blanco

Color amarillo pajizo con reflejos verdosos.
En nariz es complejo, de intensidad media y marcado por aromas de frutas y flores blancas, hinojo y fondo balsámico.
En boca es complejo, glicérico, vertical, con un amargor final que alarga las sensaciones en boca y con un posgusto largo.