La organización agraria argumenta que la Ley de la Viña y del Vino es una “ley necesaria” para un sector que genera en Castilla-La Mancha más del 4,6% del PIB regional y que representa la mitad de la superficie y la producción en toda España.

Cooperativas Agro-alimentarias de Castilla-La Mancha considera que la aprobación de la Ley de la Viña y del Vino será positiva para mejorar el futuro de la vitivinicultura regional, ya que la norma actuará de “motor” para incrementar su potencial a través de la promoción de la calidad, el control, la trazabilidad y la innovación.

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Foto de familia Cooperativas Agro-alimentarias de Castilla-La Mancha

Desde Cooperativas valoran positivamente que esta ley haga una apuesta decidida por la calidad de los vinos que se producen en la región, y también por asegurar el potencial productivo de las más de 450.000 hectáreas de viñedo que existen a lo largo y ancho de Castilla-La Mancha. Una mejora en la calidad que será posible gracias a la protección que se otorga a las indicaciones geográficas o la posibilidad de incorporar en el etiquetado menciones voluntarias como la referencia a las unidades geográficas menores como el “Vino de Finca”.

La entidad representativa de las bodegas cooperativas de Castilla-La Mancha ve muy conveniente que la ley se adecúe a los requerimientos de la nueva PAC en el sector vitivinícola, debiendo ser el motor para impulsar la mejora de la rentabilidad y competitividad de las explotaciones vitícolas y las bodegas de la región que tienen que competir en igualdad de oportunidades con el resto de las regiones de España y la UE.

También Cooperativas aprecia el respaldo que el Gobierno regional adopta específicamente en la ley sobre las medidas de internacionalización, inversión y promoción de los productos vitivinícolas de Castilla-La Mancha, mencionando a la feria Fenavin que se celebra en Ciudad Real como evento referencia del sector.

Digitalización y rigurosidad

Así mismo, desde Cooperativas Agro-alimentarias también se muestran satisfechos por el esfuerzo realizado en materia de control y trazabilidad a fin de dar la mayor transparencia posible al mercado y otorgar así garantía absoluta al vino de la región, con un nuevo régimen sancionador lo suficientemente persuasivo como para que los operadores sean rigurosos en el cumplimiento de las obligaciones que imponen las diferentes normativas autonómicas, nacionales y europeas.

Destacan igualmente que esta Ley abre la puerta de una completa y muy necesaria digitalización del sector, empezando con mejoras sustanciales en la gestión de la información a través de la digitalización de los registros y los libros de bodega, hasta la llegada de tecnología blockchain en la trazabilidad de los vinos desde el campo al consumidor.

Un impulso a la estructuración del sector vitivinícola regional

Por otro lado, la organización destaca que la nueva ley impulse la creación de una nueva Interprofesional Regional que permita al sector tomar decisiones para su autorregulación en cada campaña y su adaptación a las necesidades del mercado, o la creación de un Comité Regional Vitivinícola, que servirá de de Castilla-La Mancha.

A este respecto, Cooperativas Agro-alimentarias de Castilla-La Mancha valora positivamente la futura creación de dicha interprofesional, en la que se debería reconocer el importante peso de las bodegas cooperativas en la conformación de sus órganos, pero siempre evitando que se produzca una doble imposición en la aportación de fondos y en el mantenimiento económico de las interprofesionales de ámbito regional y nacional, respectivamente.

Una puerta abierta a la innovación

La ley contempla el impulso del gobierno regional a la investigación, el desarrollo y la innovación del sector vitivinícola a través del IRIAF (Instituto Regional de Investigación y Desarrollo Agroalimentario y Forestal de Castilla-La Mancha). En este sentido, Cooperativas cree firmemente que, para ser referencia mundial en el sector vitivinícola, Castilla-La Mancha debe crecer y evolucionar en torno a un centro de este tipo, poniendo en práctica de forma simbiótica con el sector todos los hallazgos y buenas prácticas de innovación para que éste prospere, se modernice y adopte las mejores prácticas en su beneficio.