El Consejo Regulador de la DO Bierzo ha destinado para la elaboración de vinos con este sello de calidad un total de 13.248.803 kilos de uvas, lo que supone un 85,6% de la cosecha, que ascendió a los 15.480.872 kilos.

La producción total de uvas controladas por la Denominación de Origen Bierzo ha sido de 15.480.872 kilos, de los cuales un 85,6% (13.248.803 kilos) se han destinado para la elaboración de vinos con DO Bierzo. La producción de uva controlada ha sido un 4,6% mayor respecto a la cosecha 2012 y un 4,5% inferior a la media de los últimos años, según ha informado el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Bierzo. En esta añada la DO Bierzo contó con 3.017 hectáreas de cultivo de 2.476 viticultores, y 74 instalaciones (bodegas) controladas.

Tecnovino DO Bierzo vendimia 2013
Foto: Consejo Regulador D.O. BIerzo.

Una maduración lenta que trae buenos vinos

En cuanto a los vinos de esta cosecha, “nos vamos a encontrar con vinos tintos de Mencía (9,9 millones de kilos) muy frescos y frutales, gracias a la lenta maduración de la uva, no demasiado alcohólicos y muy equilibrados, así como blancos de Godello (cada vez con más presencia como demuestran los 850.000 kilos cosechados) que serán frescos, frutales y con una gran viveza y complejidad”.
De los 13.248.803 millones de kilos de uvas con las que se elaborarán caldos de la Denominación de Origen Bierzo, cerca de diez millones pertenecen a la variedad Mencía. Por su parte, la variedad Godello ha aumentado hasta alcanzar los 850.000 kilos.

  • Mencía 9.972.911 Kg
  • Garnacha Tintorera 156.783 Kg
  • Godello 850.257 Kg
  • Doña Blanca 263.503 Kg
  • Jerez 1.993.879 Kg
  • Malvasía 11.470 Kg
  • Totales 13.248.803 Kg
  • Total de uva controlada: 15.480.872 Kg

La climatología ha marcado la campaña

La campaña de 2013 ha estado muy marcada por la climatología, que provocó que la brotación comenzase una semana más tarde que en el año anterior y que las diferentes fases del ciclo de la vid llegasen a acumular hasta dos semanas de retraso.
La maduración fue muy lenta, por este motivo la vendimia se inició el día 9 de septiembre, pero no estuvo generalizada hasta el 18 de septiembre.

Doble vendimia

La vendimia ha estado notablemente influenciada por las condiciones meteorológicas indican desde la DO Bierzo “por lo que podemos dividirla en dos partes claramente diferenciadas siendo el punto de inflexión las precipitaciones que cayeron los últimos días de septiembre”.
“La primera parte se caracteriza porque las uvas que entraron en las bodegas estaban en estado óptimo de maduración, con unas características físico-químicas y organolépticas excelentes, así como un estado sanitario excepcional. La cantidad de cosecha que entró en las bodegas en esta primera fase fue de aproximadamente un 30% de la totalidad».
A finales de septiembre debido a las lluvias hubo un parón en la vendimia, ya que las precipitaciones fueron muy abundantes y se tuvo que esperar a que los racimos se secaran y el grado alcohólico se recuperara, «ya que las uvas aumentaron su volumen y por lo tanto el grado alcohólico disminuyó. A partir de aquí, algunas parcelas se vieron afectadas por la Botritis (podredumbre), aunque los viticultores desecharon los racimos que estaban tocados haciendo que la mayor parte de las uvas que entraron en las bodegas fueran de una gran calidad”.
El Consejo Regulador de la Do Bierzo explica que “además de la uva que ha sido controlada por el Consejo Regulador, y que ha entrado en las bodegas inscritas en la Denominación de Origen, hubo aproximadamente otro millón y medio de kilos de uva, que no cumplía con los parámetros mínimos de calidad establecidos por el Consejo Regulador” y  que fueron destinadas a bodegas no amparadas por la Denominación de Origen o bien han quedado sin recolectar en las viñas.