Clunia sigue con su elaboración de vinos singulares y en esta ocasión lanza Clunia Pinot Noir, su primer vino de uva Pinot Noir que procede de un viñedo a 975 metros de altitud.

Tras dos vinos de Tempranillo, un Syrah, y un único vino blanco de la variedad Albillo, Clunia lanza otra novedad, Clunia Pinot Noir: de uvas 100% Pinot Noir.

Tecnovino Clunia Pinot Noir

Del viñedo Finca Pedraza, ubicado a 975 metros de altitud, este primer Pinot Noir de Clunia se caracteriza por la elegancia y frescura de sus aromas de frutas, fresas silvestres, frambuesas y cerezas. Con un leve paso de siete meses por barrica de roble francés, el vino ha ganado en sutileza de sabores, toques de especias y tofe.

El proyecto de Clunia siempre ha seguido sus propios pasos, marcados por la paciencia del equipo enológico para investigar el potencial de este terruño especial. Desde la bodega señalan que «Clunia Pinot Noir representa un nuevo gran paso hacia el futuro».

Estrena su primera añada 2018, producto de un lento proceso de experimentación y estudio que ha permitido a Clunia lanzar vinos más allá de lo común.

Tecnovino Clunia vinedo en altura 2

Viñedo en altura

El terruño de Clunia es diferente. De viñedos situados a unos 1.000 metros de altitud sobre el nivel del mar, los de Clunia son vinos “de altura”, como se les comienza a llamar en el sector a aquéllos que provienen de viñedos plantados a gran altitud, lo que palía los efectos del cambio climático en los vinos.

Tecnovino Clunia vinedo en altura 1

Para Clunia «la situación de los viñedos, un terruño inigualable y una viticultura inteligente son garantía de calidad, autenticidad y exclusividad, como demuestra también este nuevo vino de Pinot Noir».

Los viñedos de Clunia se comenzaron a plantar en los años 90 cuando muy pocos creían en el potencial de este terruño único ubicado a alrededor de 1.000 metros de altitud sobre el nivel del mar. A pesar de que la propiedad cuenta con, aproximadamente, 70 hectáreas en total, no todas se han plantado, ya que están convencidos de que la mejor forma de conocer un terruño tan diferente es darle tiempo, no tener prisa. Así empezaron con Tempranillo, Syrah, Albillo, y Malbec, a la que ahora se ha sumado Pinot Noir y dicen que está prevista la incorporación de nuevas plantaciones. «Todo esto hecho con calma y paciencia, con gran dedicación a la tierra y bajo rendimiento», destacan desde la bodega burgalesa.

Producción: cerca de 1.000 botellas
PVP aproximado en tiendas especializadas: 24€