El Ministerio de Comercio de China anunció el levantamiento de las investigaciones por posible competencia desleal contra los vinos importados desde la Unión Europea (UE). Esta medida pone fin al conflicto del vino entre la UE y China y es el resultado directo del acuerdo alcanzado entre los productores chinos y los europeos la pasada semana.

Tecnovino conflicto del vino China UE
Las autoridades chinas han confirmado de manera oficial la noticia conocida el pasado viernes día 21 según la cual la patronal del vino de China, Chinese Alcoholic Drinks Industry Association (CADA), informaba de la retirada de la queja que supuso el origen de las investigaciones anti-dumping y anti-subvención contra los vinos europeos. Un hecho que se produce tras alcanzar un acuerdo con el Comité Européen des Enterprises Vins (CEEV), la patronal europea, en materia de cooperación técnica.
Muchos observadores consideraban que el origen era una represalia de China contra las investigaciones abiertas por la UE contra las exportaciones chinas de paneles solares.
Como parte del acuerdo, la industria china se compromete a retirar la queja contra los vinos europeos y a darlos a conocer en el mercado chino, colaborando también en aumentar los conocimientos sobre el vino y su consumo responsable. Por su parte, la patronal europea se ha comprometido a cooperar con China en cuestiones de carácter técnico fundamentalmente.
Las empresas vitivinícolas de la UE han acogido muy favorablemente este logro, indican desde el Comité Européen des Enterprises Vins (CEEV). Su presidente, Jean Marie- Barillère, declaró estar «muy satisfecho de que la denuncia haya sido retirada por la industria china del vino. Nuestros exportadores podrán realizar sus operaciones en un mercado que es estratégico para los vinos europeos, en una competencia equitativa con los vinos nacionales y los importados de terceros países. Pero además nuestro diálogo establecido «negocio a negocio» con la industria china contribuirá a su vez a convertir un conflicto comercial en una asociación estratégica entre la UE y las industrias chinas. Todo ello representa un importante logro y también abre oportunidades a largo plazo para el sector vitivinícola de la Unión Europea».

El conflicto del vino visto desde España y el papel de la FEV

Desde la Federación Española del Vino (FEV), su secretario general, Pau Roca, ha destacado que se trata de “un acuerdo privado entre sectores”, en el que la propia Federación, como miembro del Comité Européen des Enterprises Vins (CEEV), ha jugado un papel clave, no solo informando y asesorando en todo momento a las empresas españolas implicadas en el proceso, sino también aportando la posición de las bodegas españolas durante todo el proceso de negociación. En este sentido, considera un “orgullo” para la Federación haber contribuido a la solución del conflicto, al tiempo que ha subrayado el papel del conjunto de las bodegas españolas que “se han volcado” en este proceso, liderado por la FEV.
En concreto, la FEV en un comunicado de prensa ha destacado el papel de las empresas españolas voluntarias que fueron seleccionadas para cooperar con las autoridades chinas. Por un lado, Félix Solís Avantis y Cherubino Valsangiacomo, que colaboraron en la investigación antidumping y antisubvención y, por otro, Domecq Wines España, Abadía Retuerta, Finca Loranque y Vinícola de Tomelloso, que fueron elegidas para analizar el daño producido a la industria china. Al respecto, el secretario general de la FEV ha instado al sector a “valorar el gran trabajo y esfuerzo económico que ha supuesto la colaboración de estas empresas en beneficio de toda la industria”.
Félix Solís Yáñez, presidente y consejero delegado de Félix Solís Avantis y vicepresidente de la FEV, ha señalado que el acuerdo “pone fin a una situación muy incómoda que se estaba viviendo entre Europa y China y por tanto esta solución puede ser una ventaja competitiva para los vinos europeos en China frente a otros países, lo cual es una buena noticia para el sector”.
Por su parte, Carlos Valsangiacomo, director general de Cherubino Valsangiacomo, ha  afirmado que el inicio de las investigaciones “fue un susto muy grande y llegó en el peor momento  para su empresa, coincidiendo con la época de vendimias. Sin embargo, “gracias al  trabajo de las bodegas que hemos colaborado en la investigación, apoyados por la FEV, se ha  podido solucionar un conflicto cuyas consecuencias podían haber sido muy graves para todo el  sector”. En este sentido, se ha mostrado satisfecho de que el asunto se haya cerrado sin repercusiones en un mercado con un gran número de consumidores potenciales.
Para el CEO de Domecq Wines (ahora Pernod Ricard Wine Makers) y vicepresidente de la FEV, Christian Barré, la noticia es excelente y con ella termina un periodo de incertidumbre sobre el mercado chino “al que hemos dedicado muchos esfuerzos y que tiene un enorme potencial”. Se pone de manifiesto, igualmente, que entre sectores profesionales se habla el mismo idioma y se puede convertir en oportunidad lo que comenzó como una crisis comercial.
Por último, el director general de Abadía Retuerta, Enrique Valero, ha apuntado que el acuerdo supone una doble satisfacción: “en primer lugar por la retirada de las quejas, que no deja duda de que nuestras prácticas comerciales son correctas en todo momento y se basan principalmente en la calidad de nuestros vinos y, en segundo lugar, por constatar el hecho de que trabajando coordinados y asesorados por la Federación Española del Vino así como con las administraciones públicas se alcanzan acuerdos que nos benefician a todos”.

Antecedentes del conflicto

En junio de 2013, la Chinese Alcoholic Drinks Industry Association (CADA) registró una queja ante el Ministerio de Comercio de la República Popular China (MOFCOM) afirmando que las  importaciones de vino a bajo precio y las subvenciones recibidas por las bodegas europeas han  perjudicado a la industria china. Como consecuencia de esta queja, el 1 de julio China inició una  investigación anti-dumping y otra anti-subvención contra los vinos importados de la UE. Las  investigaciones podían suponer la imposición de derechos arancelarios al vino europeo. El conflicto del vino arrancaba.
La primera fase de las investigaciones fue el registro de todos los agentes relacionados con el comercio de vino entre la UE y China dispuestos a cooperar con China. En total se registraron 5.339 empresas europeas, entre ellas más de 500 españolas. De forma paralela, en agosto de 2013, las patronales china (CADA) y europea (CEEV) acordaron iniciar un diálogo entre industrias para alcanzar una solución al conflicto y evitar la imposición de derechos arancelarios adicionales. Finalmente, tras meses de negociaciones y reuniones, ambas partes han alcanzado el acuerdo que pone fin a las investigaciones anti-dumping y antisubvención a los vinos europeos en el mercado chino.